La electrificación es el procedimiento por medio del cual se sustituyen fuentes de energías fósiles (petróleo, gas y carbón) por electricidad, la cual proviene de fuentes de energías renovables, tales como la eólica, solar, hidráulica y geotérmica. 

Esto quiere decir que la electrificación nos conduce a transformar la manera en que se realizan algunas tareas de la vida cotidiana, como por ejemplo la calefacción de nuestros hogares o el repostaje de nuestros coches. 

En este sentido, el objetivo de la electrificación es claro: descarbonizar la economía, evitar la contaminación y hacer de la industria de transporte un sector más eficiente. Aunque si bien es cierto que este proceso brinda innumerables beneficios, también existen algunos sectores de la economía que pueden verse afectados. Explicamos los pros y los contras de este procedimiento.

¿Cómo afectará la electrificación a la economía?

Los anuncios realizados por el gobierno de España sobre la prohibición de la venta de coches de combustión a partir del año 2040 han causado gran preocupación en distintos ámbitos de la industria y de la sociedad. De hecho, la existencia de un documento de trabajo manejado por la Comisión Europea en la que se plantea la descarbonización de la economía y por ende del transporte para el año 2050 deja en claro que el fin de la venta de vehículos de combustión está cerca.

Menos fuentes de empleo

Otra preocupación relacionada con la electrificación es como pueden verse afectadas las fuentes de empleo. Ciertamente, la estructura de un coche eléctrico es menos compleja que la de uno a combustión. Es decir, tiene alrededor de un 40% menos piezas, por lo que no se requiere una gran cantidad de mano de obra para su fabricación (las horas de trabajo se disminuyen en un 25%). 

Asimismo, las estaciones de servicio se verán afectadas, ya que se evolucionará de un modelo de carga de combustible a uno de carga mayormente doméstica, dejándolas como estructuras para uso en viajes largos.   

Algunas claves para la electrificación

Ahora bien, para que la electrificación sea una realidad existen algunos puntos importantes que a continuación vamos a analizar. Estos son: 

Disposición de materia prima

Uno de los principales puntos es el acceso seguro a la materia prima para desarrollar los componentes y fabricar las baterías. En este caso, China es el principal proveedor de estos materiales, luego le sigue Brasil, Estados Unidos, Rusia y por último Sudáfrica.

Para que esto sea posible, la UE debe apoyar el paso de estos materiales y prevenir las interrupciones en la cadena de suministro. De igual forma, debe secundar el desarrollo de medidas tecnológicas que ayuden a minimizar la dependencia de los mismos.  

Fabricación de baterías 

La electrificación no es posible sin las baterías, que son el componente fundamental en los coches eléctricos. El mercado de baterías está liderado por países de Asia, especialmente China, con un 80% de su producción frente a un 3% que se realiza en países de Europa.  

En estos momentos, la industria en Europa espera encabezar la tecnología de baterías de próxima generación, todo esto en conjunto con el apoyo de la Comisión Europa y las estrategias nacionales. Esto significa un gran avance, sobre todo logístico, debido en gran parte al peso de las baterías, el cual dificulta su traslado hasta las fábricas de ensamblaje de vehículos. 

Capacitación de la mano de obra

Por último, aunque no menos importante, el capital humano es fundamental para el desarrollo de la industria de la automoción. Es por esto que es necesario adaptar la formación profesional y universitaria para contar con personal capacitado capaz de enfrentar los nuevos retos que se presenten en la industria.  

I+D+i 

La industria automotriz invierte más del 4% de su facturación en investigación, desarrollo e innovación. Este esfuerzo debe mantenerse e incluso incrementarse para poder competir en los próximos años en un nuevo entorno. De esta forma, se podrán alcanzar nuevas soluciones tecnológicas en cuanto a electrificación, conectividad y automoción. 

En este sentido, en Walter Pack fabricamos productos para el sector automoción con los últimos avances tecnológicos, gracias a los esfuerzos logrados en I+D+i. Por esto, ofrecemos a nuestros clientes componentes de gama alta que marcan tendencia.